Los suelos de la región son cada vez más áridos y carentes de minerales. La situación meteorológica departamento no ayuda a solucionar la crisis alimentaria e hídrica.
Para el año 2014, el IDEAM había pronosticado que en agosto comenzaría el Fenómeno del Niño, pero en La Guajira las lluvias cesaron por completo en todo el año y la tendencia es que desde 2012 hasta lo que va de este año llueve cada vez menos.
Los ríos secos, ahuyentados por la falta de agua, uno de los principales problemas que amenaza la seguridad alimentaria del departamento, no asustan a las autoridades nacionales y departamentales, o por lo menos así parece. Como clara muestra de ello, Corpogiajira y la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) otorgaron los permisos necesarios para que la explotadora de carbón, Cerrejón, desvíe el arroyo Bruno, el principal afluente del río Ranchería. Aunque Luis Manuel Medina, director de Corpoguajira reconoce que se darán ciertas complicaciones, asegura que son mínimos, que el afluente seguirá tributando sus aguas en el río y la comunidad no se afectará en lo más mínimo. Los líderes wayuu atribuyen esta postura del director de la corporación regional a una presunta cercanía con la empresa interesada en el procedimiento.
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